El 1 de septiembre de 2014 Raif Badawi fue condenado en firme a la pena de 10 años de prisión, así como a recibir 1.000 latigazos, a la prohibición de viajar durante 10 años, a la prohibición de utilizar medios informáticos y a una multa de un millón de riyales saudíes (lo que equivale a unos 266.600 dólares estadounidenses).
El motivo de tal condena no es otro que haber creado un sitio web llamado “Liberales saudíes” (ya cerrado por un tribunal al considerar que “insultaba al Islam”). En este sitio web se permitía el debate político y social y se publicaban de forma anónima comentarios considerados ofensivos para el Islam por las autoridades religiosas.
El procedimiento judicial que se ha seguido para condenarle ha estado plagado de irregularidades. En un primer momento se le quiso condenar por un delito de apostasía (castigado con la muerte) pero finalmente fue condenado en 2013 a la pena de 7 años de prisión y a recibir 600 latigazos. En una revisión posterior, la condena aumentó a 10 años de prisión y a recibir 1.000 latigazos.
Raif Badawi es un preso de conciencia, recluido únicamente por el ejercicio pacífico de su derecho a la libertad de expresión y, por lo tanto, debe ser puesto en libertad de forma inmediata e incondicional.
Además, Amnistía Internacional ha pedido a las autoridades saudíes que no ejecuten ninguna pena de flagelación, pues ello constituye un incumplimiento de la prohibición de la tortura y otros tratos crueles, inhumanos o degradantes, recogida en el derecho internacional.
Esta información ha sido copiada y pegada de una página de Amnistía Internacional.